El comercio callejero

Puesto de libros de "La Ira Popular" en la Feria de las Pulgas de Plaza España de Concepción.

Me coloco bien despacio
en un lugar de la Plaza, (1)
a pocos minutos pasa
primera lucha de espacio. (2)
Yo no me muestro reacio
al derecho del más viejo
y por lo tanto le dejo
su lugar de cabecera,
en la venta callejera
solamente soy pendejo.

No es tan fácil competir
en la selva de cemento
para ganar el sustento
que nos permita vivir.
Siempre debes convivir
con los combos y violencia
porque es dura competencia
el comercio emprendedor:
no confundan vendedor
con robos y delincuencia.

Hay gente muy esforzada
que en la calle está vendiendo,
mensualmente va sufriendo
por alcanzar su mesada.
Extienden una frazada
con sinnúmero de cosas:
zapatos, ropas vistosas,
radios, cables, libros, discos:
no nos mostremos ariscos
con las pilchas no costosas.

Al final voy a decir
que en la viña del Señor
honesto y estafador
siempre van a convivir.
Lo importante es discernir
entre el pillo y el honrado,
para qué ser tan confiado
ni tampoco suspicaz:
entregue apoyo tenaz
al comercio callejiado. (3)

La Ira Popular
Plaza España, Concepción, domingo 9 de marzo de 2014.

(1): Referido a la Plaza España de Concepción.
(2): La situación narrada es ficticia. No tuve ningún problema al ubicarme en mi espacio :)
(3): Licencia del escritor para hacer coincidir la métrica del verso (la palabra correcta es callejeado, con E)